No, los niños no nacen homófobos, no nacen machistas, ni racistas ni xenófobos. Los niños son, para bien y para mal, lo que hacemos de ellos.
Nos ha encantado esta historia que cuentan en Instagram Bea Webster y Emma Webster-Mockett, quienes decidieron casarse el día de San Valentín y celebrar este día tan especial en el Jardín Botánico de Glasgow. Eso fue hace dos años, pero acaban de recordarlo en las redes sociales.
Ese día las dos llevaban vestidos de novia. Cuando caminaban juntas y tomaban las respectivas fotos, un niño se acercó asombrado a ellas. Y así lo cuentan en su cuenta de Instagram:
“Niño: ¡MIRA ESAS PRINCESAS!
Su mamá: Piensa que las dos se ven como princesas.
Niño: ¿Una de ustedes se casó?
Emma: ¡Nos casamos una con la otra!
Niño: ¿Dos princesas entonces?
Su mamá: Sí, ¡dos princesas pueden casarse!
Felices dos año mi amor”.
Emma contó que ese momento fue inolvidable para ella. No le gustaban mucho las fotos ni menos hacerlas en público, pero que la reacción del pequeño cambió todo para ella, la hizo sentir muy bien y muy feliz.
Las palabras del pequeño niño al ver a estas novias dan vida a una historia tan preciosa que se ha hecho viral, y cómo no, si nos hacen sentir esperanzas con las nuevas generaciones, más livianas de prejuicios y de homofobia.
Enhorabuena a las novias en su día tan especial, y enhorabuena a la madre de ese niño, por criar a ese pequeño en el respeto a la diversidad, algo tan importante a día de hoy.
VER: Así explican los niños el matrimonio homosexual