El gobernador de Puerto Rico, Ricardo Rosselló Nevares, acaba de firmar la nueva Ley de Adopción del país, a través de la cual se busca agilizar el proceso de adopción de menores de edad, y que permite la adopción por parte de personas solteras y legaliza la adopción llevada a cabo por parejas del mismo sexo.
El proyecto, que es autoría de Carlos Méndez, presidente de la Cámara de Representantes, busca agilizar, uniformar y flexibilizar el proceso de adopción para las familias puertorriqueñas. Entre las propuestas de la ley, destaca la creación de un Sistema de Refugio Seguro, el cual posibilita que una mujer pueda entregar a un recién nacido a una institución hospitalaria sin que sea criminalizada y procesada por abandono.
Méndez señaló que la firma de esta ley es un momento histórico, pues permitirá que los menores de edad sin hogar puedan tener una familia de manera más rápida, pues la propuesta presenta un nuevo sistema de localización de candidatos para realizar una adopción, proceso que no deberá tardar más de seis meses.
La nueva ley flexibiliza la adopción, ya que reforma el Código Civil con las nuevas realidades jurídicas, pues permite que puedan adoptar parejas no casadas, parejas homosexuales y personas solteras (incluidas las homosexuales).
“La adopción brinda una segunda oportunidad de vida a la niñez para que pueda crecer en un ambiente familiar. Mi aprecio y respeto particular al presidente de la Cámara, quien vivió este proceso personalmente y es vivo ejemplo de la necesidad de los cambios que convertimos hoy en ley”, indicó Rosselló Nevares.
Como era de esperar, los grupos conservadores del país han mostrado su rechazo a esta nueva ley y señalando que la normativa atenta los derechos de las y los niños, pues afirman que la adopción homoparental les impide tener acceso a una familia conformada por un padre y a la madre.
“Se le da ese énfasis en que parejas homosexuales, que ellos tienen derecho a como quieran vivir, porque ellos le darán cuentas a Dios… Nuestros niños van a ser los rehenes de conducta que ellos han vivido y están viviendo. Serán conductas aprendidas por nuestros niños también. Independientemente de lo que crean las leyes naturales de la Tierra, hay unas leyes que están por encima de esas. Son las leyes de Dios”, señaló Wanda Rolón, una líder religiosa en el país.