Los hijos de los militares y diplomáticos que nazcan en el extranjero no recibirán la ciudadanía de manera automática, según el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS, por sus siglas en inglés).
La nueva política, que acaba de entrar en vigor, afectará desproporcionadamente a las familias LGTB. Hasta ahora, el Gobierno consideraba que los niños que nacían de padres estadounidenses en el extranjero estaban “residiendo en EE.UU.” porque sus progenitores trabajaban en bases militares o legaciones diplomáticas del país.
A partir de ahora, los niños y adolescentes no serán considerados ciudadanos de manera automática y sus padres tendrán que iniciar un proceso para que el Ejecutivo se la otorgue, un trámite que deben completar antes de que su hijo cumpla 18 años.
«Estamos muy preocupados por cómo esta nueva política puede afectar a los miembros de nuestro servicio LGTB que buscan adoptar, tener hijos mediante gestación subrogada, donantes de esperma o óvulos o FIV«, dijo Peter Perkowski , director legal y político de la Asociación Militar Moderna de América, según The Hill.
Según un estudio del Instituto William’s, los padres LGTBQ + en los EE. UU. tienen cuatro veces más probabilidades de adoptar un niño. Actualmente, el 21% de los niños adoptados se encuentran entre familias LGTBQ + , lo que significa que la medida potencialmente los afectará más.
Sin embargo, el USCIS afirma que hay numerosas excepciones a esa nueva regla. Por ejemplo, los cambios no afectarán a aquellos pequeños, cuyos dos padres tengan la ciudadanía, siempre y cuando al menos uno de los progenitores resida en el país.
Estos cambios se engloban en los esfuerzos del presidente, Donald Trump, por reducir el flujo de inmigrantes que llegan al país.
«Si bien esta política no se dirige específicamente a las personas LGTBQ, parece privar de derechos a muchos estadounidenses que representan a esta nación en el extranjero«, dijo a The Hill Aaron C. Morris, director ejecutivo de Immigration Equality.