La fotógrafa Lindsay Morris ha pasado seis años fotografiando un campamento para niños con inconformidad de género entre las edades de 5 a 12 años.
Morris afirma que el Campamento “You Are You” “es un refugio seguro, donde los niños reciben apoyo para experimentar un lugar libre de juicio”.
La fotógrafa hará público un libro en octubre lleno de recursos para que las familias y escuelas puedan tomar un papel más activo en la vida de los niños LGBT.
Con el fin de financiar el libro y una exposición itinerante de imágenes del campamento, Morris inició una campaña de arranque.
“Estamos viviendo un momento histórico”, explicó Morris.
“Un tiempo y un lugar donde los padres están trabajando juntos, aprendiendo juntos, la mejor manera de abogar por sus hijos y celebrar su individualidad”.
El objetivo final de Morris es que estas imágenes ayuden a esclarecer la percepción de los jóvenes LGBT.
Y de los familiares y amigos que los apoyan.
“Para muchos (de estos niños), sus percepciones de género no están alineadas con sus cuerpos”, dijo la fotógrafa.
“Ellos más tarde pueden identificarse como gay, transexual o en algún lugar intermedio”.
Morris prosiguió explicando: “esta es sólo una manera de ser que siempre ha existido, pero sólo ahora estamos desarrollando la capacidad de decir que está bien no poner a todos en una impecable caja pequeña”.
“Va a requerir de todos nosotros para romper el hábito de asignarle a las personas una etiqueta de género y empezar a pensar en el género con una variedad más amplia”.
Ella no necesariamente piensa que la gente considerará todo eso de forma inmediata cuando vean sus fotografías.
Pero Morris tiene la esperanza de que las conversaciones acerca de la identidad de género evolucionen después que las personas las vean.
“Yo sé que tan solitaria y a veces traumática puede ser la vida para un niño LGBT”.
“El mirar sobre tu hombro y hacer tu propio camino a través de compañeros curiosos y el acoso ocasional, puede ser agotador”.
“Esa necesidad de explicarse a sí mismo no existe en el campamento. La plena libertad de expresión es algo imperioso y emocionante de presenciar”.
Fuente: Huffington Post