La española Ángela Ponce, la primera mujer trans en participar en el certamen de Miss Universo, no logró clasificarse entre las 20 finalistas en la gala final del concurso celebrado en Tailandia.
La representante de Filipinas, Catriona Gray, fue la que finalmente salió elegida como la ganadora del certamen de belleza de 2018.
No obstante, Ángela Ponce, reconocida activista por los derechos LGTB, recibió la gran ovación de la noche tras un vídeo especial que le dedicó la organización de Miss Universo como homenaje acerca de su paso por el certamen.
«Ya vivimos en un siglo en el que no podemos seguir repitiendo patrones pasados. Para erradicar la intolerancia creo que sería muy importante inculcar estos valores desde pequeños», subrayó la representante española. «Mi esperanza es que el día de mañana podamos vivir en un mundo en igualdad para todos. Simplemente que entendamos que somos seres humanos y que tenemos que hacernos la vida más fácil los unos a los otros. La realidad de otras personas va a cambiar; y, si eso lo puedo llevar al mundo, yo no necesito ganar Miss Universo porque sólo necesito estar aquí», sentenció entre lágrimas.
Coronada como Miss España en junio, llegó a la competencia acompañada, según ella misma contó, por «el enorme cariño» de la gente de todo el mundo. Sin embargo, sabía que los críticos también estaban a la orden del día. «Muchos se creen con derecho a opinar (sobre mi vida)», aseveró.