
La famosa cantante de No Doubt, Gwen Stefani, es madre de tres hijos: Kingston, de 9 años, Zuma, de 7, y Apollo, de 2. Tuvo a sus hijos con el músico Gavin Rossdale, de quien está separada desde el año pasado, después de 21 años juntos.
Gwen y Gavin tienen una excelente relación. Son amigos cercanos, decisión que tomaron por el bienestar de sus hijos. Hace dos años los medios comentaron -y algunos criticaron- que Kingston, en ese entonces de 7, saliera a la calle llevando un tutú rosa y maquillaje.
«Están acostumbrados a estar cerca de mí, y yo me pinto las uñas, me tiño el pelo y me pongo maquillaje constantemente, así que es algo normal para ellos», explicaba Gwen en una entrevista a principios de año. «Lo que quiero decir es que ser original y diferente es algo que me hace feliz, y creo que eso se traslada a ellos».
Recientemente, en una entrevista a un medio de comunicación, le preguntaron qué pasaría si uno de sus hijos fuera gay. La respuesta es todo un ejemplo para miles de padres y madres.
«Yo estaría bendecida con un hijo gay. Ustedes saben que me siento bendecida por eso. Sólo quiero que mis hijos sean felices y sanos, y solo le pido a Dios que me guíe en cada día para ser una buena madre, porque no es un trabajo fácil”, comentó Stefani
«He sido capaz de viajar por el mundo y conocí a muchos tipos diferentes de personas. Y en realidad no importa si eres gay, hetero, lo que sea. Hay gente buena y mala, y yo sería feliz. Sólo quiero que mis hijos sean felices, y cualquiera que sea el viaje que Dios les de, es su viaje. Sólo tengo que estar allí para ser la mamá más apoyadora que pueda ser y eso es lo que voy a hacer”.