La jueza Ana María Polo es un personaje muy famoso Latinoamérica y la comunidad latina de Estado Unidos. Tiene un programa de televisión llamado «Caso Cerrado» en el que resuelve conflictos que no se resuelven en tribunales, y lo que ella dictamine es ley.
La doctora Polo, como la llaman, es cubana residente en Miami. Aunque no le gusta hablar de su vida privada se sabe hace tiempo que Ana María Polo es lesbiana y vive con su novia.
En uno de sus últimos programas enfrentó el siguiente caso. Jenny, una chica de 25 años, religiosa, vivía y trabajaba en el seno de una congregación, era muy querida en su comunidad hasta que salió del armario como lesbiana y manifestó su deseo de casarse con su novia.
En ese momento el pastor enloqueció, la acusó de «diabólica» y comenzó a esparcir comentarios malignos sobre ella, que perdió su casa y su trabajo.
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Además habló con otras parroquias para que nadie la casara.
El pastor, que como veis está bastante loco y sufre un caso crítico de lesbofobia, se ampara en la libertad religiosa para no casarla, algo que puede hacer en su estado, Missisipi.
Uno de los testigos que aporta el pastor es el ex novio de Jenny, que dice que ella es muy débil y está siendo manipulada para ser lesbiana. Ahí la doctora Polo lo silencia con un «mira, ya despiértate de tu dulce sueño» (hay que reconocer que es muy graciosa).
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Él sigue y dice que no, que cuando una niña nace «torcida» comienza a caminar como machito, y si el chico nace torcido comienza a caminar como niñita. Gracias doctora Polo con callarlo con un «qué estúpido tú eres». «Ya entiendo por qué te divorciaste», le dice a Jenny.
El punto álgido del caso llega cuando entra la novia de Jenny, que es la esposa del pastor. ¡Esto si que es una buena telenovela!
La doctora Polo, obviamente, falla a favor de la pareja de lesbianas. Aquí puedes ver el programa, dura 18 minutos, realmente es divertido.