Si la pasada semana la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, anunció que permitirá el acceso a las técnicas de reproducción asistida en la seguridad social para todas las mujeres, sin importar su situación personal o condición sexual, esta vez es la consellera de Sanidad Universal, Carmen Montón, la que ha comunicado que a partir de hoy las mujeres solas y las parejas de lesbianas podrán volver a acceder a estas técnicas en los centros públicos de Valencia.
Desde julio de 2013, sólo podían realizar tratamientos de fertilidad aquellas mujeres menores de 40 años que tuviesen un problema médico o que su pareja (masculina) presentase infertilidad. Debía existir una causa de esterilidad que impidiese conseguir el embarazo. Algunas comunidades autónomas rechazaron la propuesta del gobierno por discriminatoria, Andalucía, Asturias, País Vasco, Islas Canarias, Navarra y Extremadura permitían que tanto mujeres solas como parejas lesbianas pudiesen realizarse el tratamiento de fertilidad en la reproducción asistida pública. Desde ahora, Madrid y Valencia se suman la decisión de no obstaculizar lo que ya estaba aprobado en la Ley de Reproducción Asistida de 1998.
Por otro lado, a partir de ahora ya no será necesario acudir al Registro Civil para inscribir a los recién nacidos. Un total de 24 centros sanitarios serán los primeros en aplicar la nueva ley, aprobada en julio, que establece que serán estos los encargados de remitir la documentación necesaria al Registro. Los padres deberán realizar en el hospital una declaración oficial que se enviará al Registro en un plazo de 24 horas junto con el parte médico firmado por un facultativo acreditado. El personal de enfermería que asista al parto tendrá que identificar y dar fe en este documento de la identidad de la madre.
En cada comunidad autónoma habrá, al menos, un centro sanitario que lleve a cabo dicho trámite. El sistema se extenderá paulatinamente a los demás centros sanitarios, según fuentes del Ministerio de Justicia.