Decenas de miles de taiwaneses participaron este sábado de la Gay Pride más grande de Asia, en Taipéi, y reclamaron al nuevo gobierno que legalizase el matrimonio igualitario.
La movilización albergó a 160 grupos, junto a familias, parejas e individuos con indumentarias llenas de colorido, bajo el lema «Divertirse juntos, contra la «falsa amistad» y por el verdadero respeto que da la libertad».
Funcionarios de las delegaciones de la Unión Europea, Austria, Bélgica, Canadá, Francia, Nueva Zelanda, Países Bajos y Reino Unido se unieron a la marcha, en solidaridad por la igualdad de derechos.
Para los taiwaneses y residentes en la isla, incluidos algunos venidos de China continental, el evento les sirvió para apoyar la diversidad y sentir cómo «la sociedad ha avanzado en este aspecto», en palabras de la joven Chen Li-min.
Muchos esperan que, próximamente, el Partido Democrático Progresista (DPP), que por primera vez obtuvo mayoría absoluta en las legislativas de enero pasado, autorice el matrimonio homosexual en Taiwán, y Lawrence Sun, de Taipei, espera que la isla «sea la primera en Asia» al respecto».
Taiwán es uno de los países más avanzados de Extremo Oriente en lo que respecta a la homosexualidad, pero el matrimonio igualitario progresó poco en la isla dada la larga dominación del partido conservador Kuomintang (KMT).
El Parlamento examinará pronto algunas nuevas propuestas sobre la cuestión.
La presidenta del DPP, elegida en enero, Tsai Ing-wen, se pronunció a favor del matrimonio igualitario y dijo que quiere respetar cualquier decisión que tomen los diputados.
«Todo amor es igual, toda igualdad puede lograrse por medio del amor… Hoy hay un arco iris sobre Taiwán. Sigue creyendo», anotó Tsai en su página de Facebook.