«Cuando era pequeña quería llevar el pelo corto, odiaba el color rosa, me gustaba leer y no callaba nunca. Todos los días durante el recreo tenía que escuchar lo mismo: que parecía un niño, que era bajita, gorda, fea, charlatana y muy rara». Es uno de los testimonios de una niña LGTB.
«Desde que era muy pequeño sufrí acoso por parte de otros compañeros de clase porque consideraban que me expresaba de forma amanerada. Me pegaban y me insultaban, llegaba a casa con moratones, pero no se lo contaba a mi familia. Llegué al instituto donde era incluso más común que pegaran a la “persona diferente”. Un día, antes de entrar en clase, me acorralaron 3 o 4 compañeros, me apartaron del resto del grupo y me estamparon contra una pared. Me hicieron sangre. No puede dejar más tiempo sin contárselo a mi familia. Si me recogía mi padre en el coche, iba corriendo para evitar que me agredieran. Incluso me agachaba dentro del coche para que no me vieran. En aquellos años sentía que mi vida valía menos», otro.
Y como el de ellos, muchos en la plaza de Callao de Madrid. Llevar el sufrimiento de estos niños a la población es una muy necesaria iniciativa fruto del trabajo conjunto de Save The Children y la Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Transexuales y Bisexuales, FELGTB, en la campaña #RompeElArmario.
La idea es denunciar y sensibilizar sobre el estado de desamparo en el que se encuentran en España los menores que sufren violencia y la mayor vulnerabilidad del colectivo LGTB.
«Las personas LGTBI hemos sufrido durante nuestra infancia múltiples formas de discriminación y violencia; el acoso escolar sigue siendo uno de los principales problemas, pero la violencia en el ámbito familiar es si cabe más preocupante, a partir del rechazo que sufren cuando expresan su orientación sexual», ha explicado Uge Sangil, presidenta de FELGTB.
Por ello, «el silencio y aislamiento son percibidos como la única tabla de salvación ante el miedo a la posible violencia procedente de las personas más próximas».
Desde Save the Children, Catalina Perazzo, ha incidido en que «la violencia contra la infancia es una realidad de enormes proporciones que afecta miles de niños en nuestro país».
«Con frecuencia, esta violencia se agrava cuando los niños que la sufren forman parte del colectivo LGTBI, ya que son especialmente vulnerables a sufrir acoso o ciberacoso por parte de su entorno más cercano; por ello, insistimos en denunciar la falta de medidas legislativas de prevención y detección de la violencia que se ejerce hacia los menores», ha añadido la responsable de políticas de infancia.
La FELGTB y Save the Children exigen la aprobación de la Proposición de Ley de Igualdad LGTBI, actualmente en tramitación en el Congreso de los Diputados, y la creación de una Ley Orgánica para la Erradicación de la Violencia contra la Infancia.