No llega a un año que una mujer se convertía en la primera transexual en ser la imagen de una firma de moda. La empresa era Redken y la modelo era ella: Lea T.
Se trata de una mujer valiente y con cabeza, con una belleza tan brillante y exótica que no podía ser otra cosa que brasileña.
Hija de un conocido exfutbolista, Toninho Cerezo (jugador de La Roma), Lea, bautizada como Leandro hace 34 años, no quiso usar su apellido paterno para evitar que la prensa acosara al jugador por su reasignación de género, y se decidió por una simple y rotunda T en honor a su amigo Riccardo Tisci.
Tisci, director creativo de Givency, es su gran amigo desde la universidad, y ha sido su principal apoyo a la hora de decidirse a enfrentar un cambio de sexo. El no solo la animó, sino que la ayudó a finarciarse el tratamiento, invitándola a protagonizar una campaña de su empresa.
La madre de Lea es muy religiosa, pero, tras el primer shock, sorprendió a su hija con un «Estaré feliz de tener otra hija«. Incluso su abuela, de 90 años, estuvo a su lado.
El cambio de sexo de Lea se hizo en la intimidad, como íntima ha sido hasta hace bien poco la presencia de personas transexuales en la moda: “Las modelos transexuales siempre han trabajado, pero muy pocas comentaban su situación, y si lo hacían era rodeadas de misterio. Antes no disfrutaban de libertad para hablar porque, para sobrevivir, debían amoldarse a sus clientes. Yo tuve la suerte de poder compartirlo con un buen amigo: cuando Givenchy me brindó la oportunidad de expresarme, mis espaldas estaban cubiertas”, afirma la modelo.
Lea ha saltado a la fama en el mismo momento que la modelo y medallista olímpica Caitlyn Jenner, de 66 años, mostraba feliz su nueva identidad ante seis millones de visitantes en la web de Vanity Fair. Ambas han recibido multitud de elogios y palabras de admiración, pero también puntuales desprecios e incluso acusaciones de aprovecharse de su condición para buscar la fama, todas ellas escudadas en una supuesta mirada «tolerante».
Tristemente famosa se hizo la «broma» del director de cine Clint Eastwood a Caitlyn Jenner en una entrega de premios al referirse a ella como «Caitlyn algo». Otras publicaciones de prestigio, como el País, siguen refiriéndose a la ex actriz y atleta como «el ex atleta Bruce Jenner». En definitiva, el avance de los derechos y la visibilidad de la población transexual es imparable, por fín, pero el desconocimiento y los prejuicios siguen amenazando a menudo con caricaturizar y desprestigiar un tema tan serio e importante como la disforia de género.
Gracias a personas como Lea, la manera en que la prensa y la población general comprenden y se refieren a la transexualidad esta cambiando. Para mejor.