Los personajes de Cam y Mitch de Modern Family se casaron por fin en el episodio emitido anoche en Estados Unidos, el segundo de los dos capítulos que se centran en la boda y que es el último de esta quinta temporada. La emisión coincide con la semana en que se han derogado las prohibiciones del matrimonio gay en los estados de Oregon y Pensilvania.
Pero los creadores y el reparto de la serie de ABC ganadora de varios premios Emmy no se ha centrado tanto en asuntos políticos, como en la comedia. Han conseguido hacer un capítulo divertido, aunque sin perder el punto de vista reivindicativo.
“Queremos emoción, queremos enviar un mensaje, pero si no es divertido la gente pronto empezará a perder interés”, ha dicho esta semana en la prensa especializada Steve Levitan, creador de Modern Family. “Creo que tiene muchos de sentimientos, pero también creo que es un episodio muy divertido”.
Eric Stonestreet (Cam) y Jesse Tyler Ferguson (Mitch) interpretan a los novios que llevan juntos años y que adoptaron a una hija que fue presentada en el primer episodio de la serie, hace ya cinco años.
“Nuestro objetivo principal es hacer reír al público. Que tengamos a dos personajes que lleguen a conectar y sean referencia para muchas personas que no saben lo que es una boda gay, eso es lo que trasciende del programa de televisión”, explica Stonestreet.
“Si vas a tener un momento muy honesto, tienes que ganarte esos momentos. Tienes que estar seguro que la audiencia está contigo y conoce a los personajes. Así es como podemos ir a este punto de tener una boda tan hermosa, porque la audiencia conoce a los personajes. Y eso no es algo que no hubiésemos sido capaces de hacer en la primera temporada”, añade Ferguson.
Aunque los personajes no hayan sido muy activistas en este capítulo, los actores sí que lo son. De hecho, este mismo año viajaron junto a toda la familia de la ficción a Australia, y aprovecharon para rodar un sketch por la legalización del matrimonio igualitario en el país.
Ty Burrel, cuyo personaje es el cuñado de Mitch, dijo que el episodio es “algo emocional”, pero no político. “Nosotros nunca hemos sido un programa político. Creo que lo hubiera sido si Mitch y Cam hubiesen tratado de conseguir la legalización de la lay, pero como sabemos, siendo legal en California ha hecho que se sienta como simplemente una boda, que supongo que es lo que estamos esperando que en general… que es solo una boda”, ha dicho.
El pasado mes de marzo también habló sobre el matrimonio gay. “Quizás parezca un poco exagerado, pero yo creo que en realidad los guionistas están haciendo del mundo un lugar mejor. Modern Family ha normalizado el matrimonio gay”, dijo entonces.
Por cierto, cuando grabaron estos dos capítulos, la ABC tuvo una curiosa campaña de marketing. La cadena pagó todos las bodas celebradas ese día en Nueva York.
Noticia: Ragap