Uganda ha introducido algunas de las leyes anti-LGTB más crueles del mundo, lo que significa que las personas que se identifiquen como lesbiana, gay, bisexual o transexual allí podrían enfrentarse a cadena perpetua.
El parlamento del país aprobó el proyecto de ley contra la homosexualidad, incluyendo una ampliación de “homosexualidad agravada”.
De acuerdo con la ley, este término se refiere a actos sexuales cometidos sin consentimiento o bajo coacción, contra niños, personas con discapacidades mentales y/o físicas, por un “delincuente en serie”, o que involucren incesto.
“Una persona que comete el delito de homosexualidad agravada está sujeta, en caso de condena, a sufrir la muerte”, decían las enmiendas. Es increíble. Morir por tu orientación sexual. Y eso de «delincuente en serie» simplemente responde a «reincidir» en tu orientación.
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Las relaciones homosexuales ya eran ilegales en Uganda, pero esto claramente empeora la situación de nuestra comunidad. «Vamos a aplicar la ley para asegurarnos de que los homosexuales no tienen espacio en Uganda», dijo el parlamentario Musa Ecweru.
Asuman Basalirwa presentó el proyecto de ley al parlamento, explicando que existe para “proteger la cultura de nuestra iglesia; los valores familiares legales, religiosos y tradicionales de los ugandeses de los actos que probablemente promuevan la promiscuidad sexual en este país”.
El legislador homófobo continuó: “El objetivo del proyecto de ley era establecer una legislación integral y mejorada para proteger los valores familiares tradicionales, nuestra cultura diversa, nuestras religiones, al prohibir cualquier forma de relaciones sexuales entre personas del mismo sexo y la promoción o el reconocimiento de las relaciones sexuales entre personas del mismo sexo”.
Human Rights Watch (HRW) ha condenado este proyecto de ley afirmando que “Una de las características más extremas de este nuevo proyecto de ley es que criminaliza a las personas simplemente por ser quienes son, además de infringir aún más los derechos a la privacidad y las libertades de expresión y asociación que ya están comprometidos en Uganda”.
Realmente insoportable la barbare que tienen que vivir las personas LGTB en Uganda.