Cuando por fin nos dan la noticia de que estamos embarazadas o embarazados nos llenamos de felicidad, pero a esa alegría por la llegada de un nuevo miembro a la familia se une una necesidad casi compulsiva de comprar cosas para el bebé. Lo malo es que muchos de esos artículos que hemos adquirido luego no sirven para nada y terminan ocupando sitio en los armarios hasta que nos deshacemos de ellos.
He aquí un listado con varios artículos que, por mi experiencia, sí nos van a resultar útiles y, en muchas ocasiones, imprescindibles.
- Ropa de bebé cómoda y fácil de poner y quitar. A los bebés hay que cambiarles muchas veces al día especialmente por los cambios de pañal, por lo que conviene que su ropita sea sencilla, nada de lazos y adornos innecesarios. Eso no quita que vaya a la última: hoy en día hay muchísima ropa útil a la par que cómoda.
- Baberos. Los recién nacidos suelen regurgitar la leche varias veces al día, y si no queremos tener que cambiarles tras cada toma, es conveniente tener siempre un babero a mano.
- Sujetador de lactancia que sea fácil de abrir y de tirantes anchos que nos sujete bien el pecho. Un imprescindible.
- Discos absorbentes para la lactancia. Los hay desechables y reutilizables. Yo te recomiendo los desechables por comodidad.
- Un portabebés. En la actualidad hay muchos modelos donde elegir, desde la tradicional mochila hasta los fulares o sling. Tanto el bebé como tú tenéis que sentiros cómodos.
- Carro de paseo. Es una inversión a largo plazo, así que debes de comprar un modelo que te sirva, por lo menos, hasta que tu hijo tenga dos o tres años.
- La bolsa de paseo, es decir, donde llevaremos todo lo necesario en cada salida con el bebé. Suele venir con el carrito, pero en el caso de que la compremos aparte, no debe ser excesivamente grande aunque sí tener la capacidad suficiente para que podamos llevar todo lo que vayamos a precisar.
- Biberones y esterilizador. Tanto si le vas a dar el pecho como si no, debes tener siempre algún biberón a mano, bien para completar su alimentación o bien para el agua.
- Reductor para la cuna. Si no quieres hacer el gasto innecesario del cuco, que finalmente sólo utilizan unos meses, y le compras la cuna directamente, es muy útil un reductor de cuna para que se sienta seguro en un espacio más recogido y no se pierda en la inmensidad de la cuna.
Supongo que se me queda en el tintero algún que otro artículo imprescindible, pero lo bueno que tiene también la llegada del recién nacido es la cantidad de prendas y accesorios que nos regalan los amigos y familiares, así que tampoco debemos preocuparnos demasiado ya que al final terminan sobrándonos cosas.