Es una tradición. La Marina Real de Canadá regresa a tierra después de 8 meses en altamar. Uno de los miembros desciende del barco -para ellos esto de ser el primero es un verdadero honor- y besa a su pareja. Durante décadas era un marino a su mujer. Por primera vez en muchos años eso ha cambiado. Esta vez un marino besó a su novio.
Francis Lagare desembarcó y se acercó a abrazar a su novio, Corey Vautour. Mientras se besaban recibían el apoyo de todos los presentes. Aplausos y vítores.
«He estado fuera durante 255 días, por lo que se siente muy bien», dijo Legare, sonriendo de oreja a oreja. «Estoy sin palabras.»
Puedes ver el vídeo del romántico e histórico momento aquí:
