Renne tiene apenas diez meses, pero todo lo que conoce de vida debería bastar para que sienta profundamente orgullosa de sus madres, Verónica Tejada y Karina Ibarra, una pareja de mujeres lesbianas que lleva casi un año luchando para que el Registro Civil de La Mesa, Baja California, en México, inscriba a su hija con sus dos madres
Verónica y Karina son novias desde hace 10 años. Apenas se aprobó la Ley de Matrimonio igualitario decidieron casarse, en 2015 comenzaron su proceso para ser madres a través de una inseminación artificial, la que en abril del año pasado trajo por fin a sus vidas a la pequeña Renne.
Cuando fueron a inscribir a la niña al Registro Civil, con un certificado del Hospital Regional I del Instituto Mexicano del Seguro Social, en el que constaba que la pequeña tenía dos madres, la funcionaria del Registro se negó a inscribirla como parte de una familia homoparental. Querían hacerlo solo como hija de madre soltera, asumiendo como tal la madre gestante.
Ellas se negaron. Y comenzaron una ardua lucha por sus derechos de familia, derechos que, sin duda, sientan precedente para otras parejas del mismo sexo que se encuentren con los mismos problemas. Gracias a la intervención de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Baja California, Renne figura con sus dos madres legales.
El fallo solicita también al secretario general de Gobierno del Estado, Francisco Rueda, brindar apoyo psicológica a las víctimas, una compensación económica, y una disculpa pública del Registro Civil.
Hace unos días también celebrábamos en España la victoria de dos madres lesbianas, a las que el Registro Civil d Denia les denegó el derecho de inscribir a su bebé en el libro de familia en el que están las dos madres y los hermanos, solo por no presentar pruebas de cómo fue concebido el pequeño.