El Gobierno de República Checa acaba de aprobar una propuesta que implicaría la legalización del matrimonio entre personas del mismo sexo, una iniciativa inédita en la antigua Europa comunista y que está ahora más cerca de salir adelante.
Desde 2006, la República Checa ya permite que las parejas gais y lesbianas se registren como tal, pero ahora un grupo de 46 legisladores ha secundado una propuesta para que también tengan la posibilidad de casarse y acceder a los mismos derechos que las parejas heterosexuales.
«El gobierno checo ha decidido hoy apoyar una ley de matrimonio igualitario. El documento será discutido ahora por el Parlamento. ¡Esta es una gran noticia para #LGBT en la República Checa!», publica en su página de Twitter la organización Prague Pride, celebrando la decisión de sus gobernantes que, de salir adelante, harían de su país el décimo séptimo que legaliza las bodas gais en Europa.
A diferencia de las vecinas Polonia y Eslovaquia, la República Checa es una de las sociedades más seculares de Europa, por lo que los grupos religiosos tienen una voz relativamente débil. Aún así, también existe un proyecto de ley opuesto, avalado por 37 legisladores, que exigen que su constitución defina el matrimonio como la unión entre un hombre y una mujer. La mayoría de los países de Europa occidental permiten el matrimonio entre personas del mismo sexo, pero la única región anteriormente comunista donde es legal es el este de la ahora unificada Alemania.
El 50 % de los ciudadanos apoya el matrimonio gay según una encuesta realizada en mayo, mientras que un 74 % aprueba también la normativa existente en relación a las parejas de hecho. Lo que no está claro es el momento en el que el parlamento pueda someter a votación estos dos proyectos de ley opuestos, ya que los partidos han estado luchando por crear una administración de pleno derecho desde las elecciones de octubre pasado.