Un reciente estudio canadiense compara el porcentaje de enlaces homosexuales por cada 1000 habitantes de los países pioneros en regular y permitir el matrimonio entre personas del mismo sexo, Bélgica, España, Canadá, Holanda, Noruega, Portugal, y el estado de Massachusetts, el primero de EEUU en oficializar el matrimonio. Para dar resultados rigurosos los autores han eliminado los datos del primer año en que se legalizó el matrimonio en cada país, pues suelen implicar una mayor afluencia que se va estabilizando con el paso de los meses.
MASSACHUSETTS 38 por cada 1000 habitantes
BELGICA 24 por cada 1000 habitantes
HOLANDA 19 por cada 1000 habitantes
CANADA 18 por cada 1000 habitantes
ESPAÑA 16 por cada 1000 habitantes
NORUEGA 11 por cada 1000 habitantes
PORTUGAL 9 por cada 1000 habitantes
Massachusetts lidera, con mucha diferencia, la clasificación, seguido de Bélgica. A algo más de distancia se encuentran Holanda, Canadá y España. A continuación, Noruega y por último Portugal.
Posiblemente Massachusetts, como argumentan los creadores del estudio, lidera con creces la clasificación al ser el estado donde, hasta junio de este año, los estadounidenses del resto del país iban a casarse. Bélgica por su parte facilita las bodas entre personas que lleven al menos tres meses de residencia legal en el país. No nos sorprenden las cifras de Portugal, donde hasta hace poco este tema era tabú y donde sigue haciendo falta más apoyo de ciudadanos 
y gobierno a favor de la integración y la visibilización. Tanto en Portugal como en Noruega, sus religiones, posicionadas contra el matrimonio homosexual, ejercen una importante influencia, algo que posiblemente también tiene que ver con los resultados obtenidos en ambos. (La iglesia luterana de Noruega, a la que pertenece el 75% de la población, votó en contra de celebrar bodas religiosas entre personas del mismo sexo el año pasado).
Los autores del estudio quisieron hacer especial mención a la aceptación de la realidad LGTB en una España donde el peso religioso es elevado, y al ejemplo que la ley española sentó para otros como Portugal o Argentina.
Las bodas en España alcanzaron un pico al año siguiente de la aprobación de la norma, con 4.313 enlaces, y se han ido estabilizando posteriormente ligeramente por encima de las 3.000 anuales, aproximadamente un 2% del total. El último dato disponible, aún provisional, es el de 2014, en el que se contabilizaron 3.000 matrimonios entre personas del mismo sexo. Quizá el aspecto que más destaca este año es la equiparación ya casi total en el número de bodas entre hombres (1.709) y entre mujeres (1.591). Hasta ahora, y de manera sistemática, las bodas entre hombres habían superado con claridad las bodas entre mujeres. Una tendencia que sin embargo ha ido aminorándose con el paso de los años, hasta casi igualarse en 2014.
Fuente: dosmanzanas