La aberrante situación ha sucedido en Reino Unido, en la localidad de Coventry. Una adolescente de 16 años hizo lo mismo que todos hemos hecho alguna vez, salir del armario con los padres.
Al momento de decirle a su padre, un homófobo hombre de 54 años, éste se enfureció, comenzó a gritar a su hija y la violó.
El argumento del agresor sexual fue que quería mostrar a su hija, que le confesó que luchaba con su orientación sexual, que el sexo con hombres era mejor.
Este hombre ha sido condenado a 21 años de cárcel.
El caso sucedió hace algún tiempo atrás, pero volvió a reanudarse el debate en torno al mismo en las redes sociales, para ayude a generar conciencia en torno a la libre elección de género y diversidad sexual. Casos, con similitudes al de este, siguen sucediendo en diferentes partes del mundo y merecen ser denunciados y evidenciados.
Cuando la adolescente le dijo a su padre que era lesbiana, el hombre reaccionó perdiendo el control y la violó. Al tiempo que cometía el abuso sexual se justificaba diciéndole que lo hacía para «demostrarle, por qué el sexo con hombres es mejor».
El nombre del abusador no fue revelado para resguardar la identidad de la joven víctima. Además, luego de toda la investigación que se generó al respecto, también se descubrió que había violado a su hijastra de 11 años.
Andrew Lockhart, el magistrado encargado de dictaminar la sentencia del caso explicó: «El tribunal ha escuchado a ambas víctimas. Las dos mujeres han sido seriamente dañadas psicológicamente por su comportamiento. Escuchar el sentimiento de culpabilidad de una de las víctimas al dejar a su hermana enfrentarse a él es la prueba más desgarradora de la evidencia».