Familias homoparentales encabezaron la 38 Marcha del Orgullo Gay en la Ciudad de México y exigieron el reconocimiento de las familias diversas y del matrimonio igualitario en todo el país bajo el lema “Todas las familias, todos los derechos.”
La capital fue la primera ciudad de Latinoamérica en reconocer el matrimonio igualitario, en 2010. Al inicio de la movilización, en un templete en el Ángel de la Independencia, la directora del Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la Ciudad de México (Copred), Jaqueline L’Hoist Tapia, comentó que la sociedad tiene una deuda con ese colectivo.
Asimismo, dijo que se está rompiendo el paradigma de que las familias sólo son heterosexuales; “la familia es diversa, cabemos todas y todos”, aseveró.
En tanto la directora del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred), Alexandra Haas Paciuc, refrendó el llamado de ese organismo a la población para rechazar la discriminación y a que se respeten los derechos de todas las personas.
En su oportunidad Ana de Alejandro García y Sandra López, representantes de la Red de Madres Lesbianas, destacaron la necesidad que impulsar reformas para dar certeza jurídica a los hijos y a las hijas de esos matrimonios.
Tras los discursos, las familias se subieron a dos turibuses de la ciudad de México e iniciaron la marcha hacia la plancha de Zócalo. Un segundo contingente se formó encabezado por funcionarios y activistas. Empresas privadas también tuvieron contingentes. En los grupos participaron además ingleses y canadienses que viven en México, así como simpatizantes de la diversidad sexual.
Durante la marcha, grupos de la comunidad repudiaron la violencia y expresaron su solidaridad a las víctimas del ataque perpetrado el 12 de junio en Orlando, Florida, en un centro nocturno de ambiente gay durante el cual murieron 49 personas.
En la Ciudad de México, la marcha anual por el Orgullo tuvo su primera edición en 1978, cuando 200 personas salieron a la calle para defender la diversidad.