El Coronavirus nos ha obligado a mantenernos alejados de nuestros amigos y familias, pero esto, definitivamente no detiene el amor que sentimos por esas personas especiales.
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Y como ni el amor ni la vida se detienen pese al aislamiento, hay parejas que han decidido adaptar sus bodas para poder celebrarlas en plena cuarentena. Hace apenas unos días se supo de unos enamorados que llevaron a cabo su enlace matrimonial tal como la habían planeado, pero sin invitados. Algo muy similar pasó con una pareja de lesbianas, Reilly Jennings y Amanda Wheeler, que decidieron casarse en plena calle y con el juez dando gritos desde a saber qué piso de los juzgados.
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Debido a las restricciones implementadas en el estado de Nueva York con el fin de frenar el número de contagios de Covid-19, las felices comprometidas no pudieron casarse como tenían planeado, pero se las ingeniaron para poder sellar su amor ante la ley.
Rodeadas de algunos de sus amigos y familiares, las novias escucharon al juez que desde la ventana de un edificio ofició la ceremonia tal y como lo dicta la ley; desde un lugar seguro.
El juez preguntó a las contrayentes si era su deseo unirse en matrimonio, a lo que ambas respondieron con un rotundo “ACEPTO” que gritaron tan fuerte que se enteraron tanto el juez como todas las personas que curioseaban desde las ventanas de sus casas.
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Para el momento en que la pareja fue declarada oficialmente casada, decenas de personas desde sus balcones y ventanas aplaudieron para unirse a la celebración.