Bermudas acaba de ilegalizar el matrimonio igualitario apenas seis meses después de que una sentencia del Tribunal Supremo lo hubiese aprobado en mayo de este mismo año, puesto que consideraba discriminatorio rechazar la solicitud de una pareja sólo porque fuesen del mismo sexo.
Ahora, el gobierno de este territorio británico situado en el Atlántico Norte, vuelve a ilegalizar las bodas entre parejas del mismo sexos en virtud de una nueva Ley de Asociaciones Domésticas que ha sido aprobada con 24 votos a favor y 10 en contra el pasado 8 de diciembre.
“En la actualidad, pueden tener el nombre de matrimonio pero sin los beneficios. Pero después de que se apruebe esta ley, obtendrán los beneficios y aunque no bajo el nombre de matrimonio. Los beneficios son lo que realmente quieren”, declara Lawrence Scott, miembro del parlamento del pequeño país insular.
La ministra de Asuntos del Interior, Patricia Gordon-Pamplin, afirmó que no podía apoyar una iniciativa que arrebata derechos adquiridos a un colectivo.
“Esta Ley de Asociaciones Domésticas, añade, mantiene contentos a los conservadores que no quieren modificar la definición tradicional de matrimonio, a la vez que proporciona a la comunidad LGTB los beneficios que ha estado pidiendo.
El matrimonio entre personas del mismo sexo se aprobó en mayo en las Bermudas después de que un ciudadano de la región, Winston Godwin y su prometido canadiense Greg DeRoche llevasen su caso a la Corte Suprema.
La Comisión de Derechos Humanos y la Alianza Arcoiris de Bermuda criticaron el proyecto de ley, calificándolo como una «eliminación de derechos» para las parejas homosexuales.
Rod Attride-Stirling, un abogado que trabajó en el tema del matrimonio entre personas del mismo sexo, habló en contra de la Ley de Asociación Doméstica.
«Existe un matrimonio legal entre personas del mismo sexo en las Bermudas y ahora se han celebrado varios matrimonios, por lo que el Gobierno le está quitando un derecho que existe. Si el Tribunal Supremo no se hubiera pronunciado sobre esto, entonces el puesto sería muy diferente «, dijo.
«El hecho de que ningún país en el mundo haya hecho esto debería darnos que pensar. Nos veremos tontos y opresivos, en un momento en que no podemos permitirnos esto, a la luz de todo lo que está sucediendo y del foco que nos ilumina por otras razones «.